Simón Bolívar

Sueño de integración

Obtenida la paz, el Libertador se concentra en la creación de una nueva unidad política basada en una estructura de confederación que integraría a México, Centro América, Colombia, Perú, Bolivia y Chile. Es por esta razón que decide convocar el 7 de diciembre de 1824 al Congreso de Panamá que se reunirá en 1826.

Durante este lapso Bolívar ha llegado a su momento cumbre. Marcha al Alto Perú triunfante, emite decretos y resoluciones que llevan consigo transformaciones considerables dentro del ámbito político y social. El mariscal de Ayacucho, Antonio José de Sucre, le solicita ayuda para la formulación de un proyecto constitucional para el país que llevará su nombre: Bolivia.

A pesar de la visión amplia que presentaba el proyecto del Libertador, entre Bolívar y las personas de la comarca boliviana había barreras insalvables. Dichas diferencias obstaculizaban la unidad de dirección y sus propósitos. El liderazgo del venezolano inspira desconfianza y recelo, reanimándose los deseos de autonomía.

Los primeros indicios de esta disconformidad con el proyecto y el mandato de Bolívar se empiezan a gestar en las tierras de Colombia y Venezuela. En 1826, el mismo año del Congreso de Panamá, el liderazgo del general José Antonio Páez conduce a una situación cercana al desconocimiento de la autoridad del Libertador. En el caso de los colombianos el foco de resistencia se ha formado en torno al vicepresidente Santander.

Después de cinco años de ausencia, Bolívar regresa a Bogotá. Con el peso de su autoridad logra calmar la insurrección paecista. El sueño del Libertador de retirarse después de haber culminado las campañas independentistas no iba a hacerse realidad. La lección de los acontecimientos es dura y revela la magnitud del conflicto que debe enfrentar.

Consulte:

- Orígenes
- Vida pública
- En el exilio
- Morillo y el asentamiento en Angostura
- Después de Carabobo
- El ocaso