El catolicismo es fundamental para la comprensión de América Latina, la región con más católicos en el mundo, considerada como “El Continente de la Esperanza” por la Iglesia. A pesar de los grandes problemas que ha afrontado desde la emancipación (entre ellos laicismos y anticlericalismo) y que en los últimos años han mutado hacia otros igual de graves como la expansión de nuevos cultos y la creciente debilidad social de la Iglesia, su papel sigue siendo importante. La presente línea espera analizarlo en función de un entendimiento más cabal del continente, sus valores y retos de cara al porvenir.